Napar Buru Batzar: Documentos

Opinión

08/06/2006

Los navarros tenemos derecho a decidir

Diario de Noticias

El 15 de marzo de 1982, el pleno del Parlamento Foral de Navarra aprobó por 49 votos a favor (UCD, UPN, PSOE y Partido Carlista) — con los votos en contra de EAJ/PNV y EE y las ausencias de HB, Amaiur y Grupo Mixto—, el texto de la futura Ley Orgánica de Amejoramiento del Régimen Foral de Navarra (LORAFNA) que, posteriormente, el 30 de junio del mismo año, fue aprobada definitivamente por el Congreso.

Con este trámite culminaba un proceso negociador entre la Comisión nombrada por la Diputación Foral y compuesta exclusivamente por miembros de UCD y del PSOE y los representantes del Gobierno del Estado (UCD)

En el turno en contra intervino el portavoz del Grupo Parlamentario de EAJ/PNV, Carlos Clavería, quien afirmó que “con esta Ley, el Fuero va a desaparecer por la obsesionada intención de algún navarro de pasar a la historia, aunque sea a costa de la historia del resto de los navarros. Navarra puede afirmar tajantemente que nunca ha estado tan mal representada, ni ha dado una sensación tan intensa de entreguismo y despreocupación de nuestros derechos históricos. Para nosotros el Fuero no es una negociación casi secreta, contraviniendo el mandato del Parlamento Foral, haciendo dejación de los principios de poder político que históricamente Navarra ha detentado, cediendo competencias que en ningún caso pueden considerarse inherentes a la unidad constitucional, aceptando vejatorios cambios de última hora y encima evitando al pueblo navarro que se pronuncie sobre todo ello en referéndum. Si para ustedes esto es amejorar el Fuero, háganlo y allá ustedes con su responsabilidad histórica. Pero no pretendan que nosotros pasemos por ese trágala que han fabricado con sus amigos y superiores jerárquicos de partido en Madrid”.

Los Fueros han sido y han representado la soberanía de Navarra preexistente a la configuración del Estado y que, tras el armisticio de Bergara en 1839, fueron “cepillados” sistemáticamente por el Estado, utilizando para ello como instrumento fiel al “navarrismo”, que en sus diferentes versiones se ha venido manteniendo hasta nuestros días. Fue este navarrismo ultramontano el que, junto a un PSN de nuevo cuño que poco tenía que ver con la visión de Navarra de sus antecesores de la época republicana (Constantino Salinas, por ejemplo), negoció en Madrid con el Gobierno de UCD una LORAFNA que nació ya desnaturalizada, al adaptarse previamente a la Ley Orgánica de Armonización del Proceso Autonómico (LOAPA) surgida a su vez como consecuencia de la involución política provocada tras el 23 F.

Esta LORAFNA, que tan sólo refleja la visión sectaria del navarrismo con respecto a nuestro autogobierno, tuvo además, en un nuevo ejemplo de autoritarismo, el grave déficit democrático de no haber sido consultada en referéndum a los ciudadanos navarros, que son los depositarios permanentes de la soberanía. Y todo ello contribuye a que el pilar básico del autogobierno de Navarra, en lugar de aglutinar las diferentes sensibilidades políticas e identitarias de todos los navarros, margine a un segmento cada vez más importante de la sociedad navarra que se siente vasca por ser navarra y que se identifica con su historia, su cultura y su idioma, la lingua navarrorum.

En mayo de 2003, 23 años después de ser aprobado el Amejoramiento, se constituyó la Ponencia de Autogobierno en el Parlamento Foral, a la que los diferentes partidos políticos con presencia parlamentaria acudimos presentando cada uno nuestra visión y nuestras propuestas de reforma al ordenamiento jurídico que recoge el estatus político actual de Navarra. Transcurrido un año de discusión en ponencia, en el que se han constatado las diferencias existentes, es previsible que dicha ponencia finalice sin acuerdos.

EAJ-PNV presentó ante esa Ponencia una propuesta (www.eaj-pnv.com/nbb) de reforma del Amejoramiento elaborada desde y para Navarra, y que está basada en nuestros derechos históricos, así como en el derecho que nos asiste a todos los navarros y navarras a decidir nuestro futuro, de conformidad con el moderno ordenamiento jurídico (Carta de Naciones Unidas de 1945, Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos y Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales de 1966 y Acta Final de Helsinki de 1975)

EAJ-PNV aspira democráticamente a una articulación política entre los tres ámbitos jurídico-políticos de Euskalherria, y vamos a trabajar por ello desde la política y sin la menor imposición. En ese sentido, hacemos nuestro el acuerdo de la Mesa de Egino de “aceptar la capacidad de decidir de esta realidad plural que componen la Comunidad Autónoma Vasca, la Comunidad Foral de Navarra y los territorios vascos de Aquitania, siempre y cuando una mayoría clara de los ciudadanos/as de cada uno de esos ámbitos expresase, de forma también clara, su voluntad de participar en un proceso de decisión concurrente”.

Desde la realidad de nuestra actual representación política en Navarra y con la legitimidad de ser un partido activo en la vida política de Navarra desde 1911, manifestamos nuestro compromiso de colaborar con el resto de fuerzas políticas con el fin de poner en marcha un procedimiento de trabajo conjunto, que culmine en la creación de un foro de encuentro de todas las fuerzas políticas de Navarra, sin exclusiones, en aras de lograr un amplio acuerdo político que respete la voluntad de los ciudadanos/as de Navarra expresada democráticamente, que garantice la pluralidad de nuestra sociedad y mejore nuestra convivencia.

* José Ángel Agirrebengoa es presidente del Napar Buru Batzar