En línea con el contenido del informe, Izaskun Bilbao ha destacado que “el proceso de reconciliación de Irlanda del Norte combinado con el efecto de otros fondos de reactivación económica es un ejemplo positivo para otras zonas de la Unión que han experimentado conflictos”. Igualmente ha deseado que la experiencia adquirida pueda ayudar en Euskadi. La intervención de la euro diputada vasca se ha producido en el transcurso de un debate que el Parlamento Europeo ha dedicado en Estrasburgo a analizar el impacto de la política de cohesión de la Unión en Irlanda del Norte y a reivindicar que esta apuesta comunitaria se mantenga tras la salida del Reino Unido de la Unión. La eurodiputada jeltzale ha aprovechado una referencia que hace el propio informe para manifestar su acuerdo con la idea de que estas políticas comunitarias “son un modelo para otras regiones europeas que han vivido graves episodios de violencia”.

Izaskun Bilbao ha enfatizado que “aunque el origen y el desarrollo del conflicto irlandés y el terrorismo de ETA no son comparables, si lo son algunas de sus consecuencias. Aprovechar las experiencias impulsadas por la UE y el conocimiento derivado de ellas es muy útil para resolver problemas de convivencia y valores sobre los que los vascos queremos seguir trabajando bien acompañados”.

Izaskun Bilbao Barandica ha destacado que la continuidad de este apoyo combinado entre fondos de cohesión y programa PEACE “es fundamental para la consolidación del proceso de paz salido de los acuerdos de Viernes Santo. El PEACE es un ejemplo de cómo la Unión con compromiso político y financiero, ha contribuido, en suelo europeo, a la resolución de un conflicto reconciliando comunidades y promoviendo un desarrollo más justo”. Por estas razones se ha mostrado favorable a que “el BREXIT no impida que se mantenga este apoyo ejemplar a la paz y la justicia social desde la UE”. Tal apoyo está expresado en el próximo marco financiero plurianual con más de 1.000 millones de euros destinados a todos estos programas.

El documento que ha centrado este debate y cuyos contenidos se votarán mañana, refiere las aportaciones que se han realizado a la cohesión social de esta región británica desde el fondo social europeo, el de desarrollo rural, el fondo de desarrollo regional, el fondo marítimo y para la pesca y muy especialmente el programa PEACE. Este último en concurso con los cuatro anteriormente citados se centra en financiar programas de reconciliación entre comunidades. El informe considera que el apoyo a trabajos centrados en ella combinado con medidas específicas para mejorar la situación económica y social de las comunidades enfrentadas ha sido decisivo para consolidar la paz en Irlanda del Norte y considera este modelo un ejemplo para otras regiones europeas con conflictos u otras zonas del mundo.

En las instituciones comunitarias uno de los efectos más temidos del Brexit es su eventual influencia sobre la situación de Irlanda del Norte, tanto en lo que respecta a la continuidad de los programas comunitarios como a la libertad de circulación y la situación de la frontera que separa este condado británico de la República de Irlanda.